Se ha asumido que la resistencia de los rumiantes a las micotoxinas es un hecho casi absoluto y se ha descuidado en gran medida los efectos negativos de estos metabolitos. Sin embargo, dicha resistencia no debe darse por sentada. La metabolización de las micotoxinas en el rumen no es equivalente a la desintoxicación completa.
El proceso de intensificación con los manejos más intensivos y la utilización de dietas cada vez más concentradas generan mayores tasas de pasaje en el rumen y por ende menor tiempo de permanencia del alimento en este y menor posibilidad de detoxificación.
El rumen no es una caja negra donde todo desaparece. Las micotoxinas efectivamente pueden generar daños en nuestra producción si no se toman los recaudos necesarios. Realizar análisis pertinentes es de vital importancia como lo es conocer la calidad fisicoquímica de nuestra dieta. La calidad microbiológica de los alimentos para nuestros animales es cada vez de mayor importancia en el marco de la intensificación.
Mas allá de los efectos específicos que genera cada micotoxina en particular, son un factor que contribuye a problemas crónicos, incluyendo una mayor incidencia de enfermedades, un bajo rendimiento reproductivo y/o una producción subóptima, generando una reducción en la eficiencia de producción.
El consumo prolongado de dietas con micotoxinas con concentraciones por debajo de los umbrales recomendados también puede generar problemas. En este caso y en caso donde las concentraciones de micotoxinas sean elevadas, existen en el mercado herramientas que pueden ser de mucha utilidad para prevenir o atenuar los problemas. DETOXA PLUS contiene enzimas con la capacidad de destruir las micotoxinas en compuestos menores e inocuos para los animales. No interviene en la absorción de microminerales. Se utiliza en dosis bajas y tiene efectos sobre las micotoxinas más relevantes.
