La situación no es nueva, pero llama la atención que se hayan “multiplicado los casos” en las últimas semanas y meses, según expresó al subdelegado a cargo de la Delegación Villa María de la Unión Argentina de Trabajadores Rurales y Estibadores (UATRE), Lucas Alsugaray.
El dirigente extrajo inicialmente de una carpeta las actas de constatación de labradas en los últimos días en campos de Ausonia, Ballesteros, San Marcos Sud, La Herradura y en otro establecimiento situado entre este último paraje y Villa Nueva.
En cada lugar se tomaron fotografías que demuestran las condiciones en las que viven los trabajadores (cinco de ellos en una misma pieza que se cae a pedazos, por ejemplo). Las imágenes pasan a engrosar los expedientes que obran en el Ministerio de Trabajo y el Registro Nacional de Trabajadores Rurales y Empleadores (Renatre), cuyos funcionarios acompañan a los gremialistas durante los procedimientos.
“En el caso de Ausonia, no solo que quien los contrata, el señor M.N.L., les paga menos de lo que les corresponde, sino que, al tenerlos sin registrar, los priva de la obra social, no les hace aportes previsionales… Si hasta en el acta consta que trabajan de lunes a lunes, es decir, sin un solo día de descanso”, dijo Alsugaray.
El dirigente expresó que en Ballesteros “se comprobó que G.H.G. hizo un contrato por el cual ‘se asoció’ al tambero, para que sea el responsable de no tener registrado a los demás trabajadores. Es decir, si hubiese un accidente, el responsable sería el tambero y no el empresario”.
En el caso de San Marcos Sud, el acta dice que los trabajadores no están registrados, que afirman tener tres días libres al año, que no tienen medio de transporte y que pasan días sin recibir alimentos… “Ahí, el empleador es L.M.S.C.”, remarcó Alsugaray.
En un campo de La Herradura, “los trabajadores hambreados caminaron casi cuatro horas para llegar hasta la sede del gremio y comer algo”, dijo el dirigente.
Y agregó que “en el otro campo, entre La Herradura y Villa Nueva, a la Sociedad Anónima C. también se le labró acta por indicios de explotación laboral”.
“Y mire las condiciones de la pieza donde viven cinco personas”, manifestó mientras le pasaba fotos al periodista. En ellas se aprecian grandes manchas de humedad, revoques caídos, ventanas sin vidrios, tanques de precarios calefones conectados a la electricidad con cables que van de una pared a otra por el aire.
“Hay casos en los que se les exige el pago de la luz… A casi todos los trabajadores los traen de Santiago del Estero, Formosa y Corrientes… Y les van descontando cada mes para pagar los pasajes”, añadió.
Finalmente, expresó que desde el gremio aguardan que los empleadores se presenten a las audiencias y corrijan las injusticias, porque si no lo hacen “no quedará otra alternativa que dar a conocer sus nombres, para que los trabajadores no se dejen atropellar”.
Fuente: El Diario