El operativo se concretó el pasado 11 de septiembre. El Renatre le otorgará una prestación extraordinaria y se lo incluirá en el Programa de Alfabetización Rural de la Unión Argentina de Trabajadores Rurales y Estibadores (UATRE).
El trabajador de 32 años de edad, había ingresado a trabajar allí a los 12 años. No estaba registrado ante la seguridad social, tenía una jornada de trabajo diaria que superaba el máximo de la actividad, no contaba con días de descanso ni vacaciones, y se le había hecho firmar un contrato, siendo que el trabajador es analfabeto, en el que, por ejemplo, se le descontaban gastos de energía, gastos bancarios, pérdida de animales, entre otros.
El Delegado del Renatre en Santa Fe Sur, Andrés Alasia, afirmó que “este caso realmente duele, pero por suerte pudimos actuar sumamente rápido, con muchas dificultades por la pandemia, pero logramos que el dispositivo de rescate se produzca velozmente”. Asimismo, la víctima manifestó que sufría amenazas, no recibía atención médica ni se le permitía salir del campo.
El empleador tampoco le proveía la ropa de trabajo, elementos de protección sanitarios ni acceso a agua potable. La víctima vivía dentro de la finca en una pequeña casa precaria sin revestimiento ni aislante térmico, tampoco poseía artefacto para refrigerar, en un lugar de difícil acceso y sin contar con las llaves del lugar para poder salir.
A partir de la fiscalización se constata la situación del trabajador y se hace la denuncia correspondiente a la línea 145 del Ministerio de Justicia y Derechos Humanos de la Nación, con aviso al Ministerio Público Fiscal de la Nación. Luego de realizar las denuncias y ampliaciones en PROTEX se le da intervención al Ministerio Público Fiscal de la Nación y a la Secretaría de DDHH de la provincia de Santa Fe.
El día 6 de septiembre, personal de la delegación de Renatre Santa Fe Sur, junto a personal de UATRE y Gendarmería Nacional allanaron el establecimiento rural.
A partir de allí intervienen organismos de la provincia de Santa Fe: el Ministerio de Seguridad, la Policía de Investigación (PDI), la Dirección de Protección de Derechos Civiles y Políticos. A través de ellos, el trabajador recibió asesoramiento jurídico y asistencia psicológica y sanitaria, además de alojamiento, comida y ropa. A su vez, se le realizó un hisopado ya que el propietario del establecimiento rural donde trabajaba había dado positivo de COVID-19.
El 11 de septiembre se produjo el rescate del trabajador rural, al cual se le proveyó de alojamiento momentáneo, y además, el RENATRE le otorgará una prestación extraordinaria y será rápidamente incluido en el Programa de Alfabetización Rural, dirigido por la UATRE.
“Lamentablemente, seguimos detectando estos abusos tan dolorosos, pero nuestro objetivo es colaborar con la lucha contra la explotación laboral, el trabajo infantil y el trabajo precarizado”, indicó Alasia.
Habla el operario
Oscar Gamboa es el trabajador rural de 32 años que desde hace dos décadas sobrevivía en condiciones inhumanas y mal alimentado en un campo ubicado de la localidad de Rufino, de propiedad de la familia Rossi.
Fernando Rossi, el empresario propietario del tambo, ensayó un descargo y aseguró que el peón rural que vivía en condiciones inhumanas era su “socio” y “no su empleado”.
El portal La Tribuna del Sur dialogó con Oscar Gamboa (foto), el trabajador rural de un campo ubicado en la zona norte del distrito Rufino, que recurrió a UATRE para denunciar su situación laboral. Luego del operativo de Gendarmería Nacional, el ministerio de Trabajo y UATRE, el trabajador fue trasladado a Venado Tuerto y alojado en un hotel, donde espera el resultado de un hisopado para Covid 19.
Le pedimos Gamboa que contara su historia, y el muchacho comenzó relatando que “yo estoy ahí desde que tenía 12 años, fuimos a trabajar con mi papá, mi mamá y mis hermanos…, después se fueron todos y quedamos mi papá y yo…, mi papá murió hace un año y quedé yo solo”.
Le preguntamos sobre el contrato, que los propietarios del campo aseguran que él firmó. “Sí, yo firmé eso que él dice, pero yo no sé leer ni escribir, apenas escribo algo…, yo firmé y eso es lo que me caga… pero no sé bien qué era porque ya le digo, no sé leer”, respondió el muchacho.
Y prosiguió: “A mí me tenían que pagar como decía ese contrato, pero yo no sé sacar cuentas y agarraba la plata que él me daba…, no me alcanzaba para nada”.
“Pero yo me calenté porque hace 3 meses que no me dejaba salir del campo, yo le pedía y él me decía que no le escribiera, que me iban a agarrar los milicos y él no me iba a sacar…, pero yo me le iba igual a Rufino a comprar cosas, porque le pedía a él y no me traía”, agregó Gamboa.
“También me calenté porque él me decía que me iba a hacer meter preso por 5 vacas que faltaban, y yo le decía qué iba a hacer yo con las vacas, si no podía salir del campo…, los animales se morían…; por eso hablé con López (de Uatre Rufino) y ellos me defendieron”, continuó.
En cuanto a su situación en el campo, afirmó que “no tenía casi nada, ni heladera ni nada… una camita así nomás y una cocina vieja”.
Gamboa agregó que “yo venía mal con él desde hace un año, cuando murió mi papá que lo hicieron trabajar hasta que se murió, tres meses lo atendieron y le decían que no era nada, cuando lo llevaron a Rosario le dijeron que ya era tarde, se murió de cáncer…, andaba con esa bolsita porque no podía orinar (de colostomía) y trabajaba igual… yo quiero que haya justicia por mi papá”.
“Ahora él me dijo que si yo seguía con esto le quitaban la casa a mi mamá, porque ellos le dieron una casa a mi mamá, pero ¿por qué se tienen que meter con ella si el tema es conmigo?”, afirmó Oscar Gamboa.
El muchacho finalizó diciendo que piensa quedarse en Venado, “si consigo un trabajo me quedo acá, a mí me gusta trabajar, no que me mantengan”.
Dónde hacer las denuncias por explotación laboral
Ante cualquier denuncia por malas condiciones de trabajo, trabajo infantil y/o explotación laboral, el Renatre cuenta con un sitio web o la línea gratuita 0800-777-7366, donde podrán ser atendidos en forma anónima por profesionales capacitados en la materia.
Las políticas de fiscalización implementadas por el RENATRE tienen como finalidad comprobar que los trabajadores y los empleadores estén debidamente inscriptos en el organismo y fortalecer las acciones que promuevan el trabajo decente, la lucha contra el trabajo informal, el trabajo infantil y la explotación laboral rural.