La cadena láctea se posiciona dentro de las actividades fundamentales en la recuperación económica nacional. El sector es el tercero en importancia en el complejo agroindustrial del país en valor bruto producido, posee uno de los indicadores más altos en la multiplicación de empleo y generación de valor y se ubica entre las 10 primeras de un total de 124 actividades económicas.
Hoy, el valor promedio de la tonelada exportada es de US$ 3050, muy por encima de los US$ 421 promedio del complejo agroindustrial, lo que marca a las claras el rol clave que juega en la generación de divisas en Argentina.
En este marco, la FunPEL es una organización sin fines de lucro que desde el 16 de agosto de 2011 trabaja incansablemente para dar respuestas a los problemas que enfrenta la actividad con una visión de largo plazo. Conformada por productores e industriales, se trata de un espacio de intercambio y construcción de consenso sobre los principales desafíos que tiene por delante el sector.
En su Consejo de Administración, FunPEL nuclea a siete productores y siete industriales referentes de la actividad, y se completa con su presidente, el Ing. Agr. Miguel A. Taverna, profesional de larga trayectoria del eslabón de I+D. Asimismo, entidades, cámaras, organizaciones y socios adherentes integran el Consejo Consultivo, que revisa en forma permanente el Plan Estratégico de la Cadena Láctea Argentina (PEL) y propone ideas, orientaciones y proyectos, además de asesorar a la conducción de la fundación.
Paralelamente, la institución impulsa diversas iniciativas como el OCLA, el Club de Buenas Prácticas Tamberas y el proyecto Factor Humano en Tambo, con el fin de apoyar la mejora competitiva de la cadena.
“Estamos sentando las bases de un trabajo colaborativo. Los procesos de cambio cultural y construcción de consenso no son rápidos y estoy convencido de que para esto tenemos que contribuir con la incorporación de jóvenes”, asegura el Ing. Agr Gustavo Mozeris, gerente ejecutivo de la Fundación. “Necesitamos un recambio y sangre nueva para dirigir y liderar los desafíos que se vienen, este es un proyecto que queremos impulsar en los próximos años”, resalta.
Información relevante y confiable
En diciembre de 2009, luego de un proceso de planificación estratégica denominado PEL2020, se definió que una de las carencias del sector era la falta de información confiable para la toma de decisiones.
A partir de ese momento y durante muchos años, la FunPEL puso este tema en agenda y fue en el 2016 que, a través del impulso del Ministerio de Agroindustria de la Nación, comenzó con el desarrollo del Observatorio de la Cadena Láctea Argentina (OCLA).
Administrado y gestionado por la FunPEL, OCLA cuenta con un grupo de referentes de la producción y de la industria que evalúan sus contenidos, además de realizar la revisión de las entidades integrantes del Consejo Consultivo de la fundación. En tanto, su funcionamiento operativo es financiado por un grupo de productores e industriales que forman parte de la cadena de valor.
En concreto, el objetivo de OCLA es trabajar cuidadosamente para producir datos, información, investigación y conclusiones útiles que sirvan a todos los actores de la lechería, para potenciar la producción y mejorar la competitividad de la actividad.
Diariamente se publican noticias e informes que abarcan desde información del sector primario en su integridad – tanto de la fase industrial (elaboración, stocks, productos, precios, entre otros datos) como el consumo doméstico-, hasta análisis de las exportaciones y el comportamiento del mercado mundial.
“Tenemos una fuerte presencia en los medios de comunicación locales especializados y en redes sociales. También una gran vinculación internacional, generando información para la Federación Internacional de Lechería (FIL), la Federación Panamericana de Lechería (FEPALE) e informes para Bancos Especializados y otras Consultoras que marcan la seriedad con la que trabajamos”, afirmó el CPN Jorge Giraudo, director ejecutivo de OCLA.
Fuente: Suplemento Clarín Rural ( www.clarin.com.ar )