La Organización Interprofesional Láctea (InLac) lanzó una campaña hacia los jóvenes, para valorar la vida productiva en el campo, asociada a los consumidores, que redescubren las virtudes de los alimentos que provienen de la leche.
Como en nuestro país, la continuidad de una empresa agropecuaria está en tensión. Si bien cada situación es singular, en todos los casos parece estar cruzada por motivos emparentados pues lo que parecían mandatos no escritos pero igualmente dotados de obligación, se muestran carentes de la fuerza con la que se imponía un designio en el pasado.

La InLac es una organización Interprofesional láctea que engloba a todo el sector lácteo español cuyos miembros representan a la producción, a los ganaderos y a la industria en España. En cierto modo es el instrumento vertebrador del sector lácteo cuya misión es representar los intereses comunes de la cadena del sector lácteo.
Hace unos días lanzó una campaña que puso en el centro a esta noble actividad y le dio carnadura a través de casos y situaciones concretos. El eslogan de la campaña es “Te lo agradece”, y apunta a revalorizar roles, tareas y modos de vida asociados a lo que en Argentina llamamos “la vida en el campo”. En centro de los mensajes tiene como destino subrayar el protagonismo de los jóvenes como abanderados de un movimiento social generacional, y tiene como un decidido timón a jóvenes que, en diversas labores, han decidido quedarse en el campo, contando sus historias en primera persona.

La estrategia cabalga en informar que las tareas en el tambo ya no son las que alguien desde afuera presume, ahora revalorizadas por su perfil humano, amigable con el ambiente, muy sustentable, con tecnología de punta que demandan destrezas y capacitaciones elevadas para conducir un proceso productivo noble y complejo a través del manejo de datos. Como mensaje adjunto, se hace saber de las oportunidades laborales que crea esta actividad, cada vez menos frecuentes en los grandes centros urbanos.
El titular de la InLac, Javier Roza, puesto al frente de la campaña señaló que “los consumidores se comprometen a partir de incluir a los lácteos en todas las estrategias alimentarias y de algún modo acuerdan que en el origen productivo reside una vida noble, sustentable y rentable”.
La campaña subraya además el valor de producir alimentos nutritivos, sanos y seguros, como lo son todos lo derivados de la leche. Y en este punto, se dirige un mensaje especial a los consumidores para que acompañen a este nuevo movimiento social en favor de los jóvenes y del medio rural, apostando por adquirir alimentos lácteos de origen nacional como leche, queso o yogur.
La campana diseñada desde la InLac tiene como base revertir una lógica amenazante que, puesta en números, da cuenta de que más de 1.000 ganaderos y 528 tambos discontinuaron sus actividades en el último año. La estadística señala además que más del 72% de los ganaderos tiene más de 52 años, y con ello uno de cada cuatro ganaderos en España está cerca de la edad de jubilación, es decir, tienen más de 65 años mientras que, en el lado contrario, sólo el 3,5% de los titulares tiene menos de 35 años.














