En una jornada virtual la Confederación Intercooperativa Agropecuaria (Coninagro) reunió a diferentes profesionales para analizar las dinámicas del mercado lácteo y cárnico en la Argentina, enfatizando el impacto de la pandemia actual.
El encuentro también contó con la presencia de la secretaria de Ganadería de la provincia de Córdoba, la ingeniera Catalina Boetto quien saludó a los presentes y aportó la mirada y la agenda del sector público.
Durante la charla estuvieron presentes productores y de cooperativas de Oliva, Córdoba, Freire, Silvio Péllico, San Guillermo, Morteros, Porteña, Santa Fe, Centeno, Villa María, Irigoyen, entre otros lugares.
Tras los saludos de rigor de Alejandro Buttiero, titular de Coninagro Córdoba, quien explicó los objetivos del cónclave; abrió las presentaciones Jorge Giraudo, director ejecutivo del Observatorio de la Cadena Láctea Argentina (OCLA).
La Lechería en números
Durante la exposición el contador Giraudo comentó que respecto al año pasado se dio un aumento del 5,3% en la producción de leche, generando una producción adicional de 547 millones de litros. Sin embargo, y a pesar de este aumento, la tendencia de la producción láctea en el último tramo del 2020 terminaría en los mismos índices del 2019.
Giraudo expuso que en el período enero-agosto se exportó “32% más de productos, 34% más en valor y casi 47% más de litros equivalentes, lo cual hace que las exportaciones que estaban por debajo del 20% en el periodo anterior, en este 2020 casi son el 23% del destino de la producción argentina”.
Respecto al mercado doméstico de lácteos, el consumo per cápita se igualó al del 2019 aún faltando el último trimestre del 2020, observándose un centrado consumo en aquellos productos sin menor valor agregado y en detrimento de los productos de mayor valor agregado. Esto deviene, según el especialista, de impactado por la situación económica imperante, puntualizando en que “cuando coinciden subas de producción con baja del PBI o del poder adquisitivo, el consumo, más que ajustar por volumen ajusta por precio”.
El experto enfatizó que en lo que va el año “el incremento en producción compensó la caída de precios”.
Las perspectivas según Giraudo
“Con el crecimiento previsto en la producción de leche durante los próximos 12 meses y con un consumo que tarda en recuperarse, Rabobank espera que los fundamentos del mercado global sigan siendo débiles en el segundo trimestre de 2021″, dijo Giraudo. A la vez subrayó que «un delicado reequilibrio de la oferta y la demanda está en el horizonte”.
Al mismo tiempo delimitó los factores a tener en cuenta en el futuro:
A su turno, el ingeniero Alejandro Galetto de la Junta Intercooperativa de Productores de Leche (JIPL), sintetizó algunas pautas y elementos sobre la política sectorial láctea y su cadena productiva.
Comentó, entre otras cosas, el impacto de la macroeconomía, resaltando que Argentina “no está sola” en el escenario lácteo. Brasil, Uruguay, productores por excelencia de productos lácteos, se encuentran en un estancamiento en los índices productivos desde hace algunos años, en esta marco regional nuestro país no queda exento.
En otro tramo de su análisis, puntualizó en que “existe una demanda en el pago por calidad, sobre todo en ámbitos políticos, dirigenciales y técnicos porque es políticamente correcto, es lo que está bien. Es más, en los últimos meses recrudecieron las demandas”.
La carne en números
El negocio de la carne estuvo presente con el aporte de la ingeniera Milagros Sobredo, perteneciente a Globaltecnos, se expuso de manera concreta pero eficiente los números y promedios del sector cárnico en nuestro país.
Los diferentes índices de la industria de la carne han superado el 20% de inflación en lo que va del año y, a pensar de la pandemia de Covid-19 de por medio, no se han retraído, aunque en los últimos meses han tendido a estabilizarse.
La pandemia a nivel global desencadenó una caída abrupta de las exportaciones de carne de nuestro país respecto a los niveles que se venían manteniendo a fines del año 2019. Sin embargo, se estaría generando una recuperación y el volumen exportado seria el 26% del volumen total producido.
La profesional enfatizó que existe una tendencia hacia la baja en el consumo interno de carne bovina como impacto de diferentes factores, en contraste con el aumento paulatino del consumo de carnes porcinas y avícolas.
Por Agustín Reano – Estudiante de la Licenciatura en Comunicación de la UNVM – Especial para TodoLecheria.com.ar
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