En el mismo período la cantidad de unidades productivas se redujeron a razón de un 1,5% por año pasando de 11.970 en 2015 a 10.796 en 2022, y la producción solo cayó un 0,3% anual en el mismo período, con un acumulado cercano al 2% en los 7 años mensurados. En 2022 la producción total fue de 21.160 millones de litros.
Los tambos neocelandeses se han escalado en vacas pasando de un promedio de 419 vacas por unidad productiva en 2015 a 448 vacas en 2022 (+1% por año), y la producción individual por vaca creció muy poco (+0,2% por año) y en 2022 el promedio fue de 4.370 litros por vaca/año (+1,6).
Al haber menos establecimientos lecheros y aumentar la producción individual es una obviedad que se incrementó la producción por tambo y hoy, sumando la performance de ambas islas, la producción promedio por tambo es de 5.370 litros por tambo/día, por lo que aumentó un 8,1% en el período 2015-2022.
En diálogo con TodoLecheria, la experta Esther Donkersloot, genetista de la empresa LIC, con base en la Isla Norte de Nueva Zelandia indicó que se ha frenado la expansión de los tambos y la producción en la Isla Sur (el porcentaje del total producido en esa isla del país oceánico superó el 40% del total nacional), a partir de la decisión de muchos productores de inseminar con semen de razas carniceras sus vacas lecheras, en especial con Hereford.
Añadió que restricciones de la legislación en materia ambiental es otra de las limitantes del crecimiento.