Fue en la Facultad de Ciencias Agropecuarias (UNC) y bajo el lema “Desafiando el paradigma ganadero. El búfalo: proteína con propósito, eficiencia y sustentabilidad”. El negocio va tomando porte y se prepara para nuevos desafíos.
Parecía una iniciativa muy arrojada de la cátedra de Mejoramiento animal de la Facultad de Ciencias Agropecuarias de la Universidad Nacional de Córdoba, pero no. Del encuentro se desprende que la ganadería basada en búfalos ha crecido en nuestro país y va por un lugar, a pesar que los referentes de la ganadería tradicional no han tomado nota del asunto. Al finalizar el encuentro la profe Guadalupe Roldán y su equipo de colaboradores, desde docentes hasta ayudantes alumnos se mostraron muy satisfechos. Abrieron la Jornada el decano de esa Facultad Ing. Jorge Dutto y el secretario Leandro Calle, animados por un público atento, con productores y técnicos abiertos a nuevas experiencias y un muy nutrido grupo de estudiantes.
Sin ánimo de spoilear les adelanto que, por ahora, los búfalos crecen fuerte en ganadería de carne y solo un plantel cuasi residual produce leche para icónicos quesos.
Un cambio de paradigma productivo
El encuentro buscó difundir los avances productivos y científicos vinculados al búfalo, una especie que en Argentina se perfila como alternativa ganadera de alto potencial. Su rusticidad y adaptación a ambientes adversos la convierten en una opción estratégica para zonas marginales, con capacidad de producir carne de alta proteína destinada a mercados internos y externos exigentes.
“Eficiencia productiva del búfalo en Corrientes”
Con una tonada musical propia de Corrientes, la Med. Vet. Emilia Irina Martínez, investigadora de INTA EEA Corrientes y Docente de la UNNE. Contó que desde 2020 es productora de ganado bubalino en Corrientes, pero su madre es una verdadera pionera: lleva más de 20 años haciéndolo. El negocio bubalino crece silente y firme, hay búfalos en 20 provincias y en Córdoba tiene un crecimiento importante, con 3262 cabezas y 69 productores.
El noreste es el sitio ideal para el desarrollo del búfalo (Formosa, Chaco y Corrientes es sitio ideal, donde llega a unas 120 mil cabezas). El ambiente donde se desarrolla el búfalo con oferta forrajera de pasto duro, zona de bañados y de esteros, pues necesita refrescarse, y también se adapta a planicies silvopastoriles.
El manejo es un poco diferente al manejo de la vaca. Tiene rusticidad, es fuerte, se adapta y resiste a enfermedades y tiene un bajo costo de producción. Tanto la cría y recría es de bajo costo y la invernada es rápida y eficiente.
“Las dificultades es el desconocimiento por parte de los consumidores, dificultad en la comercialización, ausencia de plantas adaptadas a la especie. Otro tema es la falta de precios de referencia”, tira Emilia Martínez pero aclara que esto es propio de un negocio que crece y va resolviendo sus desafíos por etapas.
Señala la investigadora de la UNNE que el piojo es el principal enemigo del ganado bubalino, y previene que la principal dificultad es el manejo: pasa alambrados, nada mucho y no respeta límites a su paso, pero eso se soluciona con un alambre con boyero eléctrico. Y tiene indicadores productivos muy fuertes como son la nutrición, la sanidad, la genética y el manejo.
“Se desteta a los 8 meses, nace con 30 kilos y el peso al destete (8/10 meses) es de 220/240 kgs
y está en condiciones de quedar preñada a los 30/36 meses. Sufre mucho el frío y tiene mortalidad baja. La mortalidad en adultos es solo del 1%, la reposición es baja. Hay alta longevidad, puede ser parte de un rodeo por años. Tiene un bucerro por año y a los 45 días puede volver a preñarse”, recorre Martínez.
En invernada, si ingresan con 230 k pueden salir a 460/480 kg. Antes de los dos años está el bubillo terminado para la comercialización. Ganan 500 grs por día, en invierno no gana peso pero tampoco pierde y por ello puede suplementarse en los meses fríos, muestra la investigadora. Y contó que hay diferentes suplementos con Cu, Mg, selenio y Zn. Se hizo suplementación con avena negra y con balanceado y la ganancia en kilos fue muy importante.
No tiene gasa intramuscular, es magra, tiene un grado de humedad que se debe mantener pues si no se seca. Es una carne saludable, es nutracéutica.
Tambo bubalino
En todo el mundo el búfalo es lechería pero aquí es en buena parte carne. Hay un mercado internacional de carne que no está siendo atendido. Las propiedades de la leche son muy comparables a la de la vaca, es importante. Con 5 litros se puede hacer un kilo de queso.
En Argentina hay dos razas muy populares, la Murrah y el Mediterráneo, conocidas por su doble propósito de producir carne y leche. La principal diferencia entre ellas está en su morfología, especialmente en la forma de sus cuernos. El Murrah tiene cuernos espiralados cortos y el Mediterráneo los tiene más largos, en forma de media luna hacia los costados. El Mediterráneo se considera la raza más seleccionada para la producción lechera y es originario de Italia, mientras que el Murrah tiene origen asiático, específicamente de la India, mientras que el Murrah tiene origen asiático.
Cada búfala puede producir 2,5 litros diarios durante 200 días y tiene un bubalino por año. Cada búfala puede producir ingresos por 3,5 millones de pesos/año
Vamos a los bifes: experiencias productivas con búfalos
La Angelina es un establecimiento de producción bubalina, en un sistema pastoril en monte, con lotes repartidos entre las provincias de Córdoba y San Luis. Son tres jóvenes, Juanchi, Leo y Guido Clerici, y destinan sus jornadas a la producción de carne, leche y quesos. “Se pueden regenerar 2,5 millones de hectáreas de monte nativo y arraigar personas de ese territorio, y puede ayudar a recuperar el ecosistema.
Comenzaron con la compra de búfalas preñadas. Poco forraje y ciertas plantas como duraznillo que son tóxicos”, dice Guido y esto es una virtud que no puede ser soslayada. Un poco después el Ing. Agr. Leonardo Alejandro Cocucci, docente de la FCA desarrolló esta virtud adicional que tiene el ganado bubalino para recuperar lotes.
En el primer año ingresaron vacas en un monte muy degradado. Para ello se parceló el monte. Cuatro parcelas de 3 has cada una donde en el centro de cada uno hay agua. El campo tiene unas 30 parcelas que se van rotando los animales, la sombra es una ayuda para mitigar el calor, y los cercos tienen separación de alambrado eléctrico.
Los búfalos se adaptaron muy bien a ese manejo, pasaron bien el primer invierno, en suelos vírgenes y se destetaron bubillos a los 7 meses con unos 200 kgs.
En un plan paso a paso se planteó la siembra para mejorar ambientes, en invierno y verano. Sembrado al voleo y con ello se buscaba una mejor cobertura de pasturas perennes. Cebadilla, avena y centeno y prueban especies perennes que puedan mantenerse más de un año.
Los jóvenes de La Angelina están pensando en una transición de lotes agrícolas para pasturas. Se siembra con drones con avena y centeno destinadas a pastoreo rotativo, en parcelas de una hectárea. Se hizo escuela con boyeros y luego a la parcela a pastorear.
Lotes bajos en Santa Fe cobijan otros proyectos bubalinos
El joven Ing. Agr. Nicolas Alejandro Villalba timonea una explotación dividida en cuatro establecimientos en la provincia de Santa Fe, y explica que el aprendizaje fue un poco a partir de prueba y error.
“Comenzamos en 2018 y llegaron 150 búfalas por una deuda que tenía la empresa y se aprendió un poco a los golpes, en Vera, en unas 1500 has. En la cría, las preñeces llegaron en los últimos años al 82%, los resultados en reproducción son muy altos. En 200 kilos van a invernada y a los 340 ks van a faena”, cuenta Villalba.
La dieta es 70% silo, 20 en maíz y 10 en granos de algodón, y la ganancia de peso fue 900 gramos diarios.
Las hembras fueron a recría pastoril y ganaron 560 grs promedio diario.
“En los bajos submeridionales no se ganó peso en invierno y los que perdieron peso lo ganaron muy rápido al salir del invierno”, señaló.
Entre Santa Fe y Chaco tienen 1700 madres en producción. El rodeo no supera los 8 años, se hace ciclo completo, venta de bubillos a los 24/27 meses con 450 kgs.
Claves que apunta Villalba es son animales inteligentes, el personal los recorre una vez por semana registran que los ejemplares consumen más que una vaca.
“Es clave el manejo en los corrales, con paciencia, lento, paz, perros afuera. Los boyeros eléctricos son importantes. Un perímetro tiene 45 km y se debe asegurar agua y sombra. La cuña boscosa tiene sombra y agua”, relata.
Tomás Martínez contó la experiencia productiva en Las Montarazas, en las provincias de Córdoba, Santa Fe y Chaco, en una empresa familiar.
“Siempre hicimos agricultura con rendimiento interesantes, pero luego comenzamos a introducir modificaciones. Desocupamos el depósito de agroquímicos y los llenamos de semillas. Allí decidimos que perennizar las praderas”, cuenta Tomás.
En Córdoba, realizaron un trabajado parcelado con un diseño adaptado a los montes. “Fue un cambio cultural, no hay perros, se guía a los animales a pie, sin gritos, sin apuro, hemos puesto mucha técnica de manejo del agua, mucha tecnología en general”, impacta el joven productor, y asegura que sin agroquímicos aparecieron pasturas naturales.
Comercialización de la carne de búfalo
El gerente del frigorífico Logros S.A y productor de agropecuario Ing. Agr. José María Roca y el Ing. Marco Zava (foto), miembro de la Comisión Directiva de la Asociación Argentina de Criadores de Búfalos, consultor y un verdadero pionero y eminencia de la ganadería bubalina y de otras razas índicas se refirieron a algunos desafíos estructurales que el negocio debe enfrentar.
Una buena parte de los desafíos que vienen tienen que ver con la comunicación, hacia los consumidores; y hacia el interior de la cadena en formación. Hay muchísimas hectáreas para ocupar con este proyecto, cuidando ambientes, especializando profesionales y técnicos, y convocando inversiones en la industria frigorífica, entre otros tópicos.
Los organizadores prometen un nuevo encuentro pronto, y creen que será más pronto de lo que piensan.
Por Osvaldo iachetta / Redacción Todoagro
