El conflicto de SanCor se agrava. A poco más de 10 días de una sorpresiva medida de fuerza en sus plantas, los productores, que todavía son socios y dueños de la cooperativa, amenazaron con dejar de enviar leche a las plantas industriales si persisten los bloqueos que realiza el sindicato de la industria láctea, Atilra.
El conflicto comenzó apenas tres días antes de las elecciones presidenciales. Los trabajadores agrupados en Atilra iniciaron medidas de fuerza denunciando que la compañía láctea «no cumple, hace años, con las disposiciones salariales y los aportes y contribuciones a su cargo».
El pasado lunes las autoridades de SanCor y los representantes de Atilra se reunieron en una nueva audiencia en el Ministerio de Trabajo, en un nuevo intento de conciliación que no llegó a buen puerto.
Según consta en el acta, Atilra denunció «falta de pago de haberes, muy por debajo de la escala salarial vigente y aplicable y fraccionando su entrega de manera semanal, acumulando una deuda, que solamente en el último año, supera los tres meses de sueldo».
Al respecto, los representantes de la cooperativa negaron las acusaciones y agregaron que «el mantenimiento de las medidas de fuerza, lejos de aportar una solución, no hacen que tomar más complejo el poder encontrarla, de hecho SanCor, se sostiene con la generación de fondos para lo cual requiere normalizar la producción».
Según informaron desde el gremio, los trabajadores realizan asambleas informativas con paradas técnicas de cuatro horas todos los días, lo cual altera la producción de la láctea.
En este escenario los socios amenazaron, a través de un comunicado, con comenzar a derivar la materia prima de sus tambos a otras industrias.
«Teniendo en cuenta la incertidumbre generalizada que esta situación provoca, la interrupción de los procesos productivos, comerciales y la consecuente pérdida de ingresos que afectarán, entre otros, el pago de salarios y materia prima. En tal sentido, para evitar el inminente derrame de leche, los productores, evaluarán la posibilidad de dejar de entregar, a la Cooperativa, la materia prima que producen», resaltó un comunicado enviado por la empresa.
«Los productores asociados a SanCor manifestaron su preocupación por el conflicto suscitado por parte del gremio y el alto riesgo implícito de que se repita la necesidad de desechar una significativa cantidad de leche entregada», agregó el comunicado.
En medio del tironeo entre el gremio y la cooperativa se esperan novedades sobre la posible constitución de un fideicomiso para la incorporación de inversores externos con el objetivo de implementar un salvataje de largo plazo. «Los directivos vienen dilatando este proceso y nosotros pedimos que se acelere para poder regularizar nuestra situación», explicaron fuentes del gremio.
El conflicto mantiene en vilo a 1.450 operarios de las seis fábricas lecheras y un centro de distribución de SanCor, el mayor empleador individual de la Argentina de la actividad.
El comunicado enviado a la redacción de TodoLechería por parte de la empresa señala lo siguiente:
SanCor: la necesidad de dar certezas y priorizar la fuerza laboral
Luego de varios años de negociaciones y trabajo, la alternativa de solución posible que veníamos desarrollando para establecer un futuro más seguro para la Cooperativa, no alcanzó sus objetivos. Esto se debió fundamentalmente al tiempo transcurrido y al conjunto de dificultades e impedimentos planteados entre las partes involucradas en el proceso. SanCor dio cumplimiento a todas las exigencias que legalmente pudo llevar adelante, en tanto que no se verificaron los aportes operativos y económicos que debió realizar la contraparte.
Autoridades técnicas no aprobaron el proyecto, marcando deficiencias al parecer, insalvables. Entre otros aspectos relevantes, desde SanCor hemos planteado la imposibilidad que tuvo el Fideicomiso para darle certeza y sustentabilidad a los casi 900 trabajadores que quedarían fuera de los planes del nuevo negocio y deberían continuar en la órbita de la Cooperativa, ya sin actividad industrial y sin siquiera asegurarles lo que hoy están cobrando, aunque entendemos que no es lo que corresponde. Adicionalmente, a todos quienes optaron por el retiro voluntario, que de buena fe han acordado su salida de la Cooperativa, no se los tuvo en cuenta en el Flujo de Caja que fue presentado a los organismos de contralor, con lo cual quedaban sin ningún tipo de cobertura.
Ante esta situación, ha sido la Cooperativa quien, a pesar de las acciones que todos conocemos que se están llevando adelante, planteó que la única forma de avanzar en el proceso, es darle certeza a los trabajadores que no van a pasar al Fideicomiso y a las personas que tienen retiro anticipado vigente, entre otros aspectos que deben ser de cumplimiento legal obligatorio.
En estos momentos, SanCor está ampliando los canales de diálogo específicos con el personal, para que cada uno pueda informarse adecuadamente y con claridad para evacuar las dudas que se le presentan antes de tomar decisiones.
Como lo hemos manifestado en numerosas oportunidades, la Cooperativa priorizó y prioriza el mantenimiento de la operatoria y de su personal. Así fue que, entre otros logros, se pudo sostener el pago mensual de las remuneraciones a los empleados y retirados con acuerdo voluntario, sin perjuicio de la extensión de los plazos en los pagos. Es imposible sostener la operatoria sin la elaboración y venta de productos, porque ellos son el único flujo financiero de la Cooperativa.
Sabemos que el esfuerzo que han realizado en todo este tiempo ha sido mucho y la retribución no ha sido la que correspondería, pero aseguramos que todas las decisiones se han tomado para garantizar la operatoria y sostener las fuentes laborales, con la pretensión de aumentar los volúmenes procesados, llegar a la ocupación total de la capacidad instalada y, consecuentemente, generar seguridad. Hoy, todo esto pone bajo serio riesgo no sólo a la Cooperativa sino a toda la fuerza laboral.
Fuente: El Cronista ( www.cronista.com )