Dirigido por investigadores de la Universidad de Melbourne y Austin Health, el Ensayo de fracturas investigó cómo la comida que se sirve en los centros de atención para personas mayores afecta la salud de los residentes. Sesenta centros de atención a personas mayores y más de 7000 residentes participaron en el estudio durante dos años, donde la mitad de los centros continuaron con su menú habitual y la otra mitad aumentaron sus raciones de lácteos (leche, queso, yogur y leche desnatada en polvo) de un promedio de dos a 3.5 porciones por día.
Los investigadores encontraron que este cambio en la dieta resultó en una serie de cambios clínicamente significativos que incluyen:
Ingesta mejorada de calcio y proteínas.
Reducción del 33% en todas las fracturas
46% de reducción de fracturas de cadera
11% de reducción de caídas.
Se descubrió que la intervención era segura, eficaz, accesible y apetecible, lo que proporciona evidencia de que la provisión de productos lácteos es una solución eficaz para las caídas y fracturas.
El estudio fue financiado en parte por nueve organizaciones lácteas internacionales.
Lea el nuevo estudio completo haciendo aquí