La empresa Estancias del Lago, de capitales de origen argentinos, pero enclavada en el Departamento de Durazno, de la República Oriental del Uruguay destaca en su sitio web: “Llevamos adelante un complejo agroindustrial sostenible para la producción de Leche en polvo que se ubica en Uruguay. Nuestros establecimientos ocupan más de 37.000 hectáreas, principalmente en el centro del país. La agricultura con fertirriego y la ganadería intensiva y mejorada se integran a la más moderna industria. De esta forma, se obtiene un tracking del producto en todo momento, con calidad certificada según estándares internacionales”.
Añade que “en nuestros procesos sustituimos fertilizantes y combustibles fósiles por energías renovables. Además, minimizamos el consumo de sustancias químicas y emisiones de gases de efecto invernadero. Todo, para producir una de las mejores leches en polvo del mundo. En total, se producirán unas 20.000 toneladas anuales, obtenidas de un tambo propio que es el de mayores dimensiones en el país y la región, que contará con más de 13.000 animales en ordeñe”.
«Nuestro gran objetivo en Estancias del Lago es ser una empresa agroindustrial sostenible elaborando productos de primera calidad», destaca como misión en su portal de internet.
Un objetivo que se acerca
Y Estancias del Lago se acerca a su objetivo: “Nosotros estamos apuntando a llegar ahora en pocos meses a 13.000 vacas. En este momento estamos en 12.500” puntualiza Adolfo Storni, en diálogo con el periodista Miguel Borsatto en el programa “Lo que Pasa” de AM930 Radio Villa María.
Explicó el sistema de producción de esta manera: “Nosotros tenemos toda la cría del animal hasta el ordeñe, también producimos carne con los terneros machos, y producimos todo el forraje, el silaje y parte de los granos que se utilizan en la alimentación de todos los animales en ordeñe, la creía, la recría y el engorde”.
Al mismo tiempo, Storni indicó: “Tenemos una fábrica de leche en polvo al lado del tambo principal. En este momento estamos procesando el equivalente a 18.000 toneladas de leche en polvo y estamos con un excedente que hoy estamos vendiendo a la industria local, o sea que somos productores primarios, somos industriales y también somos remitentes a otras industrias”.
Estancias del Lago es una compañía cuyo cara visible es Alejandro Bulgheroni, fundador del Grupo Bridas, quien es accionista de Panamerican Energy. Respecto a la inversión realizada se habló en medios periodísticos de 164 millones de dólares, de los cuales un tercio fueron aportados por el Banco Interamericano de Desarrollo (BID), al ser un proyecto “banda verde”.
Respecto al precio al productor dijo: Aproximadamente está en el entorno de los US$0,30. En este momento Argentina y Uruguay están con valores similares para la leche al productor, pero son los más bajos del mundo. En otros lugares como Chile, Brasil, Nueva Zelanda, Estados Unidos o Europa, están todos con valores bastante superiores, entre US$0,33 y US$0,38, pero todo depende del tipo de distorsión que hay en el tipo de cambio de moneda”.
El destino de la leche producido en los megaestablos de Durazno es el mercado externo: “Nosotros toda la leche en polvo la exportamos, es el producto que más vende la empresa. Tenemos varias líneas de negocios: la principal es la leche en polvo, la carne, leche fluida, y después algunos subproductos menores como el aceite que se produce de la destrucción de la soja, nosotros usamos expeler de soja en la alimentación y también algunos otros granos que se utilizan dentro de la rotación de los cultivos agrícolas, pero hoy el 70% de la venta de la empresa es leche en polvo”.
El impacto de la pandemia y las devaluaciones
“En este momento, desde marzo que empezó la emergencia sanitaria tuvimos que modificar muchas formas de trabajo en cuanto a distanciamiento, prevención, controles, reforzar las medidas de higiene, evitar aglomeraciones, desinfecciones, controles de temperatura, uso de barbijos, tomamos todas las precauciones del caso”, dijo Storni.
Los números de infectados y fallecidos indican que Uruguay tiene las tasas más bajas de Latinoamérica. “Lo que hemos visto hasta ahora ha tenido una baja tasa de infección, no es el caso de Argentina o Brasil que fue mayor, Uruguay ha sido bastante menor. O sea que por un lado en la empresa se han extremado los controles y por otro lado también hemos visto que hay sectores en el mundo donde hay cierto canales de venta de producto afectados por el cierre de restaurantes y hay productos, tanto lácteos como productos de consumos masivos que están en este canal, han visto resentidas sus ventas. Pero por otro lado ha habido un aumento de consumo masivo de las leches fluidas, leches larga vida y productos que se consumen en el hogar para cocinar como yogures y algunos quesos, o sea que siempre la experiencia de todo esto a nivel consumo es un poco surtida”.
Pero en función de un esquema de producción atado al mercado externo, implica tener un ojo en el sistema de producción y sus costos y otro en el valor del dólar: Lo que hemos visto nosotros como más perjudicial es esta guerra de devaluaciones desde que empezó el año con la devaluación importante de Brasil que prácticamente ha frenado sus importaciones de productos lácteos entre marzo y mayo, ahora recién levemente está comenzando a comprar porque se han consumido todo el stock que venían teniendo. Y después todas las situaciones que están pasando hoy en día en Europa con los excedentes que hay de leche en polvo descremada porque se empezó a frenar algunas ventas de productos de exportaciones entonces esos excedentes se vuelcan en el mercado”.
El obvio que la impronta bajista del mercado mundial de lácteos es otro factor que juega: “Para nosotros el golpe grande está en el precio, en prepandemia había una situación donde los precios del mercado internacional estaban en US$3.300 dólares por la leche en polvo entera y después bajaron a US$2.700. Esa situación no podemos atribuirla 100% a la pandemia sino como algunas consecuencias de factores macroeconómicos que han pasado en los distintos bloques comerciales, y básicamente el más grave ha sido las devaluaciones, casi todos los países que importan leche en polvo entera han devaluado mucho y eso ha encarecido al producto, y también hay toda una relación en muchos países importadores que son grandes productores de petróleo, así que hay todo un tema de las devaluaciones de las monedas y como arrastra eso al precio de los commodities, lo hemos visto en la soja, en el maíz, petróleo y obviamente en la leche en polvo”.
Preguntado si hubo despidos o recortes en el personal, el presidente de Estancias del Lago dijo: “Estamos con la plantilla completa, no hemos desvinculado a nadie ni mandado a seguro de amparo que es una alternativa que tiene la legislación laboral uruguaya, estamos trabajando a full. El ordeñe ha sido record en el mes de mayo, hemos superado los records de producción. En el caso del tambo principal que nosotros llamamos San Pedro que tiene 10.000 vacas, ese tambo la semana pasada el promedio de las vacas dio 40 litros por vaca, lo que nos posiciona como el tambo de mayor producción en promedio, con picos de vacas de 55 litros, que son el resultado de todo un trabajo de años basado en la genética, el confort animal, el manejo y la alimentación”.
Cabe destacar que hace tres días atrás, en el marco de una entrevista con el diario El País, Adolfo Storni puntualizó que el principal comprador mundial de lácteos es China, pero Uruguay queda afuera porque tiene un arancel del 10%. “El 90% de las importaciones de China provienen de Nueva Zelanda”, hoy poder entrar mejor al grande asiático “es el desafío que se debería cumplir”, dijo y sumó: “La vía es lograr en un mediano plazo un acuerdo de libre comercio, es un camino inevitable y dará oportunidades a los lácteos y muchos productos más”.
La empresa está vendiendo lácteos a varios países de Sudamérica y también de Centroamérica, pero las grandes devaluaciones de algunas economías “son restricciones relevantes”. Y agregó: “La competitividad de productos sufren en manos de otros países con mayor devaluación”.
Por último, el presidente de Estancias del Lago aseguró que la clave es tener a Brasil con una macroeconomía ordenada y un tipo de cambio menos volátil. “Eso ayuda siempre”, señaló el ejecutivo.
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